“No existe modernidad sin una buena tradición”. Este es el lema que ha inspirado a Croqueta y Presumida, la nueva franquicia vasca de este exquisito manjar autóctono de nuestro país que todavía se mantiene asequible para todos los bolsillos. Cansados de las típicas tapas españolas de croquetas que al fin y al cabo, son iguales en todos los restaurantes, descubrimos este pequeño pero coqueto rincón que recientemente ha abierto sus puertas en Sabadell. Tal fue nuestra sorpresa al echarle un ojo a sus atípicas variedades y ver sabores de lo más peculiares para una croqueta.
Y es que su carta, combina la tradición de las croquetas artesanas, preparadas cada mañana con leche fresca de caserío con la modernidad de la cocina creativa. Crujientes por fuera y cremosas por dentro, sus coquetas croquetas mezclan sabores de tierra y mar “Made in Spain”. Sabores tan singulares que van desde el pulpo gallego, centollo, bacalao, o chipirón en su tinta, pasando por el País Vasco con su chistorra o queso de Idiazábal, hasta la explosión en el paladar de la croqueta de carne y piquillo, o la de puerro y gambas.
Pero sin duda, nuestra favorita es la que a primera vista parece un bombón. Hablamos de la deliciosa croqueta de chocolate, elaborada por el maestro chocolatero Rafa Gorrotxategi, y que su textura y cremosidad hará que se deshaga en la boca como si de una trufa se tratase.
Una parada imprescindible para los amantes de esta delicia en miniatura que no frena en su intento de reinventarse con sabores frescos y actuales.
