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Las Rutas románticas de San Miguel de Allende




De callecitas estrechas, balcones románticos y empedrados de cuento, San Miguel de Allende es una bella ciudad que está considerada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Miles de amantes del arte y de la historia viajan hasta esta ciudad para desvelar todos sus encantos.


La arquitectura es uno de los aportes más grandes de San Miguel de Allende, pues todas sus construcciones coloniales caracterizan el colorido y el sabor de un pueblo típico mexicano.


Este lugar adquiere su nombre a partir del general Ignacio Allende, originario de esta localidad, quien se une a Don Miguel Hidalgo en su lucha por conseguir la independencia de México. Es por esto que San Miguel de Allende, está considerado como la Fragua de la independencia mexicana.


Para quienes son amantes del arte, existe una numerosa cantidad de galerías donde se exhibe todo tipo de pintura y escultura. Los artistas son tanto nacionales como internacionales, pues esta pequeña ciudad se caracteriza por ser un espacio cosmopolita e intercultural.


Uno de los lugares a los que no se puede dejar de ir es la Parroquia de San Miguel Arcángel, que se edificó a partir de 1880 por Zeferino Gutiérrez, un albañil que había participado en varios proyectos arquitectónicos, pero no de tal magnitud. Sin embargo, se inspiró en obras góticas europeas e hizo de un sueño una de las realidades más atractivas de esta ciudad. El estilo exterior del recinto es neogótico y está hecho de cantera rosa y el interior es neoclásico y tiene la forma de la cruz latina. Algunas de las pinturas de la iglesia se atribuyen a Juan Rodríguez Juárez, un importante artista mexicano representante del barroco en el virreinato de la Nueva España.


La plaza Allende, es el centro de esta ciudad, y aquí se encuentra el jardín principal decorado con un pintoresco kiosco, asimismo la sede de la Presidencia Municipal se asienta ahí también.


Un dato curioso es que para los que se quieran casar en este pueblo, deben de seguir la tradición en donde junto con la estudiantina y todos los invitados, los novios recorren el centro caminando, cantando y bebiendo; la novia se coloca una corona de flores en la cabeza y va sentada sobre un burro que va jalando el novio.

Otros lugares que se recomiendan para visitar son el Museo Histórico de San Miguel de Allende, el Instituto Allende, el Santuario de Atotonilco, los Jardines Botánicos y la Santa Casa de Loreto. Sin embargo, la mejor manera de disfrutar San Miguel de Allende es caminar de noche por sus callejones y escuchar a las estudiantinas que recorren diariamente sus plazoletas.



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